De EnciclopAtys
“Un nuevo sol se alza sobre Atys, después de una noche agitada pero, al final, feliz.
La batalla comenzó bajo la lluvia, mientras unos pocos homins construían lo que sería el frente definitivo: unas pocas aldeas para albergar a los valientes que esperaban impedir que la plaga kitin avanzara demasiado tierra adentro. También se construyeron tres campamentos, tres aldeas para los muchos que quedaban, quizás demasiados.
Juntos, los homins se concentraron en los pocos preparativos, los últimos, pues los exploradores no habían detectado el ataque antes. Juntos, vistiendo los mismos colores, sin mediar palabra, se dedicaron a sus tareas, ansiosos por terminar. Desafortunadamente, el tiempo se agotaba... demasiado pronto, mucho antes de que se construyera la última columna, llegaron los primeros insectos, ¡y lo que podría haber sido una defensa sin mayores dificultades se convirtió en la defensa de todo un pueblo! Todos tenían que hacer su parte; ¡nadie tenía elección! Guerrero o artesano, ambos eran necesarios en el frente…
Armas y armaduras se distribuían libremente a los homins voluntarios, pero a veces inexpertos. Se les daban las lanzas que luego atravesarían a los grandes kitins, o las hachas que los aplastarían. Día y noche, el trabajo continuaba hasta que se daba la primera alarma, entre gritos y dudas, cuando llegó la primera oleada enemiga… allí estaban, cientos o miles, como esperando la misma señal que impulsó a los homins a avanzar.
La lucha fue difícil, y finalmente, cuando la victoria se avecinaba, se supo que uno de los bandos había caído, ¡y que el ansiado descanso se transformó en una lucha aún más encarnizada! Muchos sugirieron esperar hasta mañana, cuando los muertos perdonarían… pero una brecha así significa el fin, así que los más valientes emprenden el camino para superar una vez más sus límites.
Día tras día, noche tras noche, la victoria se fraguó. Muchas veces, los campamentos cayeron, y otras tantas fueron recapturados, derrotando a estas criaturas, casi hermosas por sus colores dorados. La fatiga se convirtió en aliada, se transformó en furia, agotando los pensamientos. La gente ya no luchaba para defenderse, sino porque era lo único en lo que podían pensar... Una extraña lucha, esta vez por la Libertad, no para pensar, sino para vivir; para derrotar a este flagelo indeseado, para vivir, enamorados de la Libertad.
Día tras día, noche tras noche, nadie se rindió, o si lo hicieron, los culpables supieron ser perdonados. Junto a los más valientes e inocentes, el ejército homín avanzó hacia lo que fue su victoria, superando a miles de insectos tan grandes como sus edificios, con la esperanza de destruir a aquel al que llamaban el Dominante. Por senderos a través del desierto o el bosque, bajo los rayos o en medio de lagos, fueran lo que fueran, avanzaron para destruir las últimas defensas kitin... pero el enemigo ya no estaba allí, había huido.
Una victoria, dicen, para los homíns, y es cierto. Pero el enemigo sigue ahí, acechando bajo tierra... derrotado, muy débil, pero vivo. Regresará, en el giro de una sombra cuando brillen las estrellas, para recordar pesadillas pasadas, el azote de los homins.
Libre, libre para vivir... y para seguir esperando.
— Escrito por un veterano
Véase también
Notas
Antes del Gran Enjambre
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| Fuego de Coriolis
La juventud de Loria • La fiebre del descubrimiento • El asedio de Karavia • La Compañía de Loria • La Liberación de los Trykers • El asesinato de Loria |
Las Crónicas del Gran Enjambre - De 2481 a 2484
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| La masacre y la huida
Una historia de Kitin • Cuando los Muros se Derrumban • Mi Guardián de la Karavan • La Canción de los Kitins El regreso de la esperanza |
Las Crónicas del Nuevo Comienzo - Desde 2485 hasta 2525
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| Crónicas de Aeden Aqueous
El Secreto de la Ingeniería Tryker • Huida en flyner • Historia de un joven Corsario Crónicas de las Alturas Verdes Los Descendientes de Zachini • Ciochini Cuisi • El muro de Lenardi • Crisálida • La Caída • Sombras Aullantes • Crónicas de V.M. Crónicas del Desierto Ardiente Rompe Aguas • La Pira de Cerakos o el Nacimiento de Pyr Crónicas del País Marchitándose Lágrimas de Serenidad • El Llorón Mektoub • Estancia de Daïsha • Mabreka |