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Texto de referencia (Texto actualizado, utilizado como referencia) :
Notas :

Estos fragmentos de pergamino de buena calidad provienen del diario del secretario y consejero del Emperador, Dexton Epus. Él se los confió a los Patriotas durante una extraña convocatoria, conocida posteriormente como "Las Revelaciones de Epus".^[1]

Quinteth, Harvestor 15, 3.er CA 2548

El Emperador ha perdido mucho peso, por lo que su armadura necesita ser reajustada. Esto podría parecer insignificante, pero parece preocupar a sus médicos.

Prima, Winderly 11, 2.º CA 2549

Ya no es posible negar que el Emperador está enfermo, y él mismo finalmente me lo ha confesado. Se cansa cada vez con más facilidad y sigue perdiendo peso, y, por desgracia, ningún remedio parece ser efectivo por el momento. Todo esto empieza a ser preocupante. ¿Acaso nuestros médicos son impotentes ante esta enfermedad desconocida que está consumiendo lentamente Sharükos?

Tria, Nivia 21, 2.º CA 2549

El Emperador lleva enfermo varios meses. Esto no le impide gobernar el Imperio adecuadamente, pero se está volviendo más irritable, menos paciente y sus arrebatos de ira son frecuentes. Tendremos que reducir sus apariciones públicas si no queremos que todo esto llame la atención.

Tria, Thermis 21, 3.º CA 2549

Las capacidades físicas del Emperador disminuyen un poco más cada día. Esta mañana, durante su entrenamiento marcial diario, se vio incapaz de vencer a sus oponentes y tuvo que interrumpir la sesión. Debemos tomar precauciones para que su debilidad física temporal no se haga pública, pues sin duda nuestros enemigos se aprovecharían de ella.

Dua, Pluvia 2, 3er CA 2549

Nos enfrentamos a graves problemas... La enfermedad de Sharükos comienza a afectar sus facultades mentales; esto se hace evidente. El arrebato de los akenak, al revelar su fe en Jena inmediatamente después de su elección, lo ha sumido en un estado indescriptible, y ha decidido proclamar un decreto absurdo que amenaza con socavar la Asamblea Akenak e incluso provocar una guerra civil. Lykos hizo todo lo posible por disuadirlo, al igual que sus consejeros y todo el Senado, pero el Emperador, clavando la mirada en su hijo, simplemente respondió: «Padre, yo soy el Emperador, yo decido». ¿Un momento aislado de locura o el comienzo de un largo camino hacia la demencia? El tiempo lo dirá, pero esto se está volviendo cada vez más preocupante...

Holeth, Pluvia 7, 3er CA 2549

El Emperador continúa debilitándose físicamente, pero se niega a aceptar su lento declive. Su ira contra su enfermedad, desconocida para todos, se está volviendo contra nosotros, y su irritabilidad es ahora constante. Resulta evidente que el decreto que proclamó en contra de nuestra voluntad fue, en efecto, un síntoma del inicio de la demencia, ya que su estado mental no ha dejado de empeorar desde entonces. El otro día, tuve enormes dificultades para impedir que entregara su espada imperial a Rudo Kleos, un guardia que estaba de servicio en ese momento frente a las puertas de los aposentos imperiales. Y justo ayer, Lykos tuvo que negociar durante horas para convencerlo de que abandonara su plan de lanzar un ejército para conquistar Aeden Aqueous, con el fin de obtener un suministro ilimitado de agua... En estos momentos, Dexton no es más capaz de gobernar su país de lo que lo sería Rudo Kleos, y el propio Lykos comprende que iniciar la Regencia es esencial. En momentos cada vez más infrecuentes, el Emperador casi recupera su forma humana, y entonces, puedo ver renacer la esperanza en los ojos de Sharümal...

Dua, Mystia 1, 3.er CA 2549

Nada ni nadie pudo impedir que Dexton exiliara públicamente a los Patriotas de Jena en términos muy vagos y susceptibles de diversas interpretaciones, y esto sin haberlo consultado previamente con ningún consejero, ni siquiera con su hijo. Nada ni nadie pudo salvar las apariencias persuadiéndolo de emitir un decreto oficial sobre esta decisión, pues al día siguiente había olvidado por completo haber hecho tales comentarios. El Emperador se hunde cada día más en la debilidad y la locura, y nuestros médicos siguen tan impotentes como siempre ante ello.

Quarta, Harvestor 12, 1.er CA 2550

Lykos envió una misiva a Mabreka Cho esta mañana, informándole de la situación y pidiéndole consejo. Dexton ya había acogido a Mabreka y la había ayudado en un momento difícil; ahora le tocaba a él devolverle el favor.

Prima, Nivia 3, 1er año CA 2550

La esperanza y la desesperación se entrelazan sin cesar. El Gran Sabio respondió a Lykos: enviará en secreto a su sanador personal a Dexton... el Emperador que, esta misma mañana, me tendió un brazo debilitado para que lo ayudara a levantarse...

Holeth, Fallenor 20, 3er CA 2550

Durante casi dos ciclos, el sanador Zorai ha estado cuidando del Emperador. Habla en una lengua oscura, la lengua de quienes meditan profundamente, una lengua incomprensible para los homins comunes. Sin embargo, todas nuestras esperanzas recaen en él, y especialmente en el remedio que administra diariamente al Sharükos. En los últimos días, el Emperador ha parecido mejorar; sigue físicamente débil, pero parece estar recuperando la consciencia. ¡Qué alegría verlo volver a ser el de antes! Cualquier idea de regencia queda descartada, ¡pues el Emperador sanará!

Tria, Floris 10, 4.º CA 2550

Desilusión, aniquilación, fin del sueño... El destello de lucidez de Dexton se ha desvanecido; el Emperador ha sucumbido una vez más a la locura. El sanador Zoraï ha admitido la ineficacia de su remedio y ha regresado a investigar la enfermedad en los archivos médicos de la Teocracia. La Emperatriz Xania y el Príncipe vuelven a velar cada noche, turnándose, y al verlos tan ansiosos y exhaustos, temo cada vez más por su salud.

Quarta, Harvestor 4, 1.er CA 2551

La ira de los Patriotas hierve a fuego lento... se debaten entre su lealtad al Emperador y su negativa a sufrir las consecuencias de un decreto desastroso, ignorando que fue decidido en un momento de locura. Lykos está perdido... No puede revocar el decreto ni revelar la enfermedad del Emperador al Pueblo: él solo es el Príncipe, y su padre, aunque gravemente enfermo, sigue siendo el gobernante del Imperio.

Thermis 16, 2.º CA 2551

El senador Abycus Zekops fue rescatado de los Merodeadores gracias al esfuerzo conjunto de todo el pueblo, admirablemente liderado por Lykos. El Príncipe permanece en una situación muy difícil. Es testigo impotente de la angustia de su pueblo, pero no puede desobedecer la decisión de su padre... Dexton, a pesar de su enfermedad y su indiferencia ante la noticia de la liberación del senador —un senador cuya existencia misma había olvidado— sigue siendo el Emperador...

Dua, Medis 20, 4.º CA 2551

La Emperatriz y Sharümal hablaron extensamente esta mañana en mi presencia. El tiempo de esperar y aguardar un milagro ha terminado, y tampoco se trata de sentir que traicionamos a Dexton al pedirle al Senado que establezca una Regencia mientras el Emperador aún vive... Debemos actuar ahora, antes de que el orgulloso pueblo de Fyros sea completamente destrozado.

La decisión inevitable está tomada. El Imperio necesita un líder. Xania convocará al Senado y pedirá al celiakos que declare una Regencia, con Lykos a la cabeza. Me inclino ante su sabiduría y fortaleza de espíritu en tiempos tan oscuros...

Véase también

• On fyren i an sharük ansum

Notas

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