¡Tres semanas! ¡Tres semanas han pasado, y aún no hay noticias!

     Pero aún antes de aquello, Orphie se había visto... diferente. Perdida en sus pensamientos, sin abandonar su oficina.
Ella había permitido visitantes en muy raras ocasiones, incluyendo un par de homins desconocidos.


    Y cuando, finalmente, ella salió, aquello había sido para preguntar algo para preparar su partida al nido de los kitines del Bosque Almati. Sola.
Apocamus se había enfadado, gritado, discutido, seducido, intentando forzar y amablemente convencerla de no tomar aquel viaje sola. Pero ella había dicho su última palabra y asignado a Melga Folgore para reemplazarla durante su ausencia la cual, ella había asegurado, serían máximo dos semanas.


Y tres semanas han pasado hasta ahora...