Somos los Tryker, los homins más bajos del planeta, pero todo el mundo sabe que los mejores ungüentos están en los más pequeños tarros. ¡Chiste! Nos gusta reír. Y no se necesita cerveza , nuestra bebida favorita, para bromear. ¡Ja, ja!
Nos reímos, pero somos muy serios en lo que hacemos y concentrarnos porque también nos encanta inventar soluciones...
y un día volaremos a la Canope.
Y a pesar de eso, somos más ecológicos que los Zoraïs, porque sabemos que todo tiene un precio y que nada es gratis.
Aún así, sabemos cómo compartir mejor que nadie.
Preferimos negociar que guerrear, pero cuidado, también sabemos cómo vender nuestra piel muy caro.
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somos libres, pero para asegurarlo tenemos leyes que respectar :
Recuérdate que todos los homínis son responsables y están libres de sus acciones. Un homin que viola la libertad de otro irá en contra de los derechos del Homin, que por cierto, fueron establecidos por primera vez por el Consejo de los Tryker.
Cada homín tiene los mismos derechos: ir y venir, aprender, cosechar recursos naturales, elegir su propio destino, siempre y cuando no usurpe otros derechos de los homínis.
Nuestra fuerza reside en nuestra solidaridad y que esta solidaridad nace del compartir. Si pudiéramos persuadir a todos los hijos de Jena para que sean como nosotros, Tryker, pensamos que el mundo sería mucho más seguro.
Y por fin, gracias a esta disciplina, podemos disfrutar de los placeres simples de la vida
